El Capitolio de La Habana, también conocido como Capitolio Nacional de Cuba, es uno de los lugares de interés más populares de la capital. Su hermosa y clásica arquitectura, inspirada en otros estilos europeos, así como su intención original de ser un palacio presidencial, con toda la estructura y decoración que eso conlleva, lo distingue entre todos los demás edificios y lo posiciona entre las mejores obras arquitectónicas y monumentos nacionales de Cuba. Está ubicado en Centro Habana y es una visita obligada a tu paso por la zona.
Las construcción del Capitolio Nacional de Cuba terminó en el año 1929 durante la presidencia de Gerardo Machado. Por aquel entonces Cuba vivía un período de bonanza económica provocada por el boom de uno de los productos estrella de la isla: el azúcar. Así que parte de estos nuevos ingresos fueron destinados a su construcción.
Muchos arquitectos y obreros intervinieron en ella, pero destaca Eugenio Raynieri Piedra como director técnico y encargado de la parte artística del proyecto. En su construcción se tuvo muy en cuenta cada detalle y se usaron los mejores materiales, importados incluso desde países como Francia e Italia. También se basaron en el famoso Panteón de París, en Europa, para el diseño del edificio. Sin embargo, su imagen se parece mucho al capitolio de Washington D.C. Lo que está claro es que en cada pared, techo y columna se aprecia el trabajo realizado y por eso es uno de los mejores edificios de su estilo incluso a escala internacional.
Destacan varias partes del capitolio por su excelencia arquitectónica. La cúpula, por ejemplo, de 62 m y hecha en piedra, corona el edificio con su perfecta simetría, sus detalles dorados y la escultura que remata el conjunto hecha en el siglo XVI por el escultor Giambologna. Recientemente ha sido objeto de un proceso de restauración para devolverle su lustre original.
Debajo de la cúpula, en el piso superior, se encuentra la réplica exacta de un diamante de 25 quilates.
Pero el espacio más popular del edificio es el Salón de los Pasos Perdidos, nombre que se debe a la acústica, y en el cual, entre columnas griegas, suelos cristalinos y gigantescos ventanales, se encuentra la Estatua de La República. Es una enorme escultura de bronce de 14,60 m de altura, que representa a una mujer guerrera, con su escudo, su atavío griego y una lanza, simbolizando el trabajo y la virtud del pueblo.
También existen otros cuatro salones que destacan por su belleza y estilo arquitectónico. Al norte y a la derecha del edificio está el Salón Baire, antigua sala de conferencias y Cámara de Representantes; luego está el Salón Bolívar, de espejos venecianos y mobiliario original; el Salón Baraguá, que también conserva el mobiliario y la decoración neoclásica original; y el Salón Martí, de estilo renacentista y bellos colores.
En el año 2010 el Capitolio Nacional de Cuba fue declarado Patrimonio Nacional.
Más información:
Ubicación:
Centro Habana, La Habana, Cuba.
Horario:
de 9:00 a 20:00.
Precio de la entrada:
3 CUC sin guía, 4 CUC con guía.
Mapa Interactivo:
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